Por qué será que me asaltan tantos recuerdos ahora que me hago viejo. Mañana, trece de abril, cumplo ya 72 años. Y parece que me acuerdo antes de lo que me ocurrió de chico que de lo que hice antes de ayer. Siempre me he llevado bien con la gente mayor, he sabido apreciarlos y entenderme con ellos. Por ejemplo recuerdo de cuando me iba a segar con Julián, el de Inocente. Ese hombre era fabuloso. Siempre que he vuelto al pueblo por vacaciones buscaba echarme el rato con él. También charlar con el abuelo Chinche era una gloria. Es grande la amistad de un hombre vivido y sensato, como a mí me gustaría llegar a ser cuando me vaya haciendo mayor.